Soy más que un encierro

La situación de alerta que estamos viviendo nos tiene a muchos, en muchos países, encerrados en nuestras casas para evitar propagación y contagios. Y a veces podemos llegar a obsesionarnos con el encierro y dejar de contemplar otras cosas, porque estamos fusionados con esa idea y las sensaciones que provoca.

En este momento, propongo una reflexión que es una apuesta por una nueva mirada, donde lo que nos ocurre no se desconecta de lo que somos. Igual que ya hemos superado la diferenciación entre cuerpo y mente, herencia de Platón, ahora es el momento de entender que lo que vivimos en un momento concreto de nuestra vida no nos define o determina, porque podemos despegarnos del presente; es cierto que culturalmente está muy de moda el momento presente, vivir el presente,… pero desde nuestra mirada, nos abstraemos y sabemos que el presente enlaza pasado y futuro. La física cuántica nos lo recuerda.

Somos más que seres en cuarentena, porque somos más que las circunstancias que nos toca vivir. Somos lo que somos y lo que estamos siendo, porque somos también lo que podemos llegar a ser; parece un juego de palabras, pero es sencillo entender que somos también nuestras posibilidades; si me miro ahora mismo, veo un ser confinado, pero soy capaz de ver más allá y ver a un ser libremente recluido y con posibilidades de salir. El ser humano es versátil e impredecible. Somos capaces de superar muchas situaciones y “sacamos fuerzas de flaqueza” cuando lo necesitamos de verdad. Si miro sólo lo que me está sucediendo y que no puedo salir de casa, es posible sentirme bloqueado. Por eso mi mirada, desde la esperanza y el realismo, se centra en las fuerzas y el potencial. La persona es más que un accidente, enfermedad, suicidio o cualquier situación traumática que le toque vivir, como puede ser un confinamiento.

Obsesionarme con lo que no puedo hacer me lleva a rebelarme, a rechazar este momento que estoy viviendo. Y es que lo he dejado convertirse en lo único de mi vida.

Sin embargo, si creo que soy más que lo que ahora vivo:

…me puedo distanciar de lo que en este momento me ocurre. Desde la logoterapia hablamos de que el ser humano tiene la posibilidad de autodistanciamiento, de entender que podemos poner distancia entre lo que somos y lo que nos pasa; ahora mismo, estás en aislamiento, pero eres mucho más.

… cuento con la fuerza de la posibilidad; eres lo que eres y aquello en lo que te puedes convertir. Mirar sólo el momento presente es limitante; descubre qué posibilidades tienes, ahora, en tu mano. No te centres en lo que no puedes hacer, sino en lo que está a tu alcance.

… puedo ver siempre mi capacidad de superación y la de los demás. Y esto me da libertad aunque decida no salir.

«Este es un momento a todas luces excepcional en nuestra vida. Ojalá no nos quedemos solo en el ahora, porque somos mucho más que un confinamiento. Al final, si algo es seguro, es que más tarde o temprano, ESTO TAMBIÉN PASARÁ».